La estimulación brinda a los niños las herramientas necesarias para desarrollar sus funciones e ir superando cada etapa.
Es de importancia generar un ambiente enriquecido de estímulos (sonoros, táctiles olfativos y visuales), donde el bebe logre jugar a su manera.
Se debe plantear situaciones que se conviertan en desafíos, acorde a sus necesidades (dadas en función de la etapa en la que se encuentre), de tal forma que no resulten inabordables (pudiendo generar una frustración) o de muy fácil resolución (que fomenten una actitud pasiva).El objetivo en última instancia es incentivar al niño y contenerlo al mismo tiempo.
Es por esto que estimular al niño tiene que ver con una forma de criarlo: es brindarle los recursos para adaptarse por sus medios al mundo que los rodea.
Algunas acciones para estimular al bebé:
3 primeros meses:
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En estos primero tiempos los bebes son sostenidos por los brazos de sus padres y en este vínculo es donde empiezan a aparecer los primeros juegos.
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El primer objeto de juego que tienen los bebes es su propio cuerpo: se chupan las manos, tratan de llevarse los pies a la boca, etc.
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Serán de gran ayuda los libros o figura con dibujos o imágenes de diversas formas o colores, los móviles y cuneros, los sonajeros y la música variada e incluso las canciones entonadas por cada madre o padre.
4 a 6 meses:
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Comenzar a sentarlo por un tiempo con un buen apoyo (almohadones en la espalda).
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Acostarlo boca arriba, flexionando las piernas y ofrecerle las manos para que las tome y trate de sentarse.
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Acostarlo boca abajo y mostrarle un objeto desde lo alto para que lo mire, ya que al levantar la cabeza trabajará los músculos de la cabeza y el tronco
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Estimularlo hablándole o cantándole.
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Acercarle sonajeros y/o juguetes que hagan ruido y agitarlos, tratar de que él los tome también y los haga sonar.
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Ofrecerle objetos de diferentes texturas para que manipule.
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Permitir que toque con sus manos tu cara, tu pelo y al mismo tiempo nombrar las partes que el bebé vaya tocando.
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Para reforzar la imitación de los movimientos, abrir y cerrar la boca delante del bebé, esto además irá desarrollando el reconocimiento de la figura humana.
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Ubicarlo frente al espejo para que se vaya descubriendo e identificando.
7 a 12 meses:
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Dejar que el bebé toque la comida con sus manos y pueda apreciar su textura y hacer que se lleve la comida a la boca para que relacione la textura con el sabor.
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Poner su mano debajo de la canilla graduando la salida de agua para que sienta la variabilidad de su volumen.
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Ejercitar el abrir y cerrar una cajita. Esta actividad de manipulación les dará la oportunidad de enseñarle a trabajar con ambas manos.
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Reforzar la sensación de pertenencia al grupo familiar: darle la oportunidad de unirse al grupo familiar en la limpieza, por ejemplo acercarle un trapo para que trate de limpiar su mesa.
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Reforzar el garabateo, en el papel extendiendo en el suelo un papel grande y darle al niño un lápiz poco afilado o crayones gruesos y de vivos colores.
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Desarrollar a nivel mental la permanencia del objeto. Esconder ciertos objetos y preguntar en voz alta por ellos, comprobar la reacción del bebé y volver a entregárselo, para repetir el ejercicio.
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Cuando esté boca arriba, ofrecerle los dedos para ayudarlo a incorporarse repitiendo las palabras ?arriba? y ?abajo? y con el tiempo hará este ejercicio mediante la simple indicación verbal.
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Del gateo a los primeros pasos no solo incorpora madurez motriz sino que también obtiene autonomía para buscar experiencias sensoriales a través de sus movimientos.
Autor: LIBEDULA03