Definir las verdaderas exigencias personales y las características del hogar, evitando una compra impulsiva, ayuda a optimizar la inversión. A veces, después de comprar un artefacto eléctrico, nos damos cuenta de que si bien lo necesitábamos nos causa algunos problemas o es insuficiente o excesivo para nuestras necesidades, quedando con la sensación de que no hicimos una buena inversión. Esto puede pasar con cualquier electrodoméstico, desde una batidora hasta un refrigerador de dos puertas.
Para evitar estas situaciones, expertos vinculados al rubro son partidarios de que, antes de entusiasmarse por algún artículo, lo imaginemos en el hogar, aspecto importante por cuestiones de espacio, y no dejarse deslumbrar por «los numerosos usos» e «infinitas posibilidades» que ofrece tal o cual producto, puesto que terminamos ocupando uno o dos de ellos.
Lo otro que recomiendan es identificar el estilo de vida que llevamos y preguntarnos si lo vamos a cambiar en el corto plazo. Algunas preguntas que vale la pena responder son si vivimos solos, en pareja o familia, cuánto tiempo pasamos en casa, cuánto y cuándo comemos, cuánta ropa usamos, lo que conviene considerar al decidir la compra y si la usaremos para un fin específico o también de adorno.
El espacio y el uso
Entre los consejos se cuentan los relativos a los más usados, como el televisor. Hoy, muchas viviendas, sobre todo departamentos, tienen dormitorios de apenas 2,7 por 2,7 metros y living-comedores de 3 por 5. Por lo tanto, conviene medirlos antes de comprar un televisor, ya que uno de más de 14 o 19 pulgadas no deja espacio para transitar. La solución podría ser uno de pantalla plana, que se cuelga en las paredes, pero hay que verificar si son sólidas o hechas con tabiques de volcanita, que no resisten mucho peso.
Otro mueble importante es el refrigerador. Frente a éstos, cabe tomar en cuenta si somos una familia grande, mediana, pequeña o si vivimos solos, y acostumbramos a congelar alimentos. En este caso conviene uno pequeño, de baja potencia, complementándolo con un congelador exclusivo, de más capacidad. Si se elige un refrigerador grande, de dos puertas, hay que medir los accesos de la vivienda. No sea cosa que no podamos llevarlo al sitio elegido. Para aprovecharlo mejor, nos recuerdan que estos aparatos deben estar en lugares con buena ventilación y fuera del alcance de la luz solar.
Otro electrodoméstico de gran llegada es el microondas. Pocos son los que los destinan a cocinar. Si usted se da cuenta de que sólo lo va a usar para calentar comida, uno de buena marca, pero pocos botones y uso sencillo es lo que conviene.
Los equipos de música siguen siendo tan populares como las primeras radios. Esos con hartos botones y luces son aptos para los «perilla», a quienes les gusta investigar hasta el menor uso del equipo y se leen el manual de principio a fin. Pero si sólo quiere escuchar música, es mejor ignorar los adornos y un equipo simple que no le sobren botones, es lo apto.
Otro aparato es el reproductor de videos, sea de cinta o DVD. Este último es mejor en cuanto a calidad de imagen, pero aún es más caro que los videograbadoras y más todavía que los pasa películas. También aquí conviene considerar qué es lo que nos ofrece cada aparato.
Las lavadoras son grandes facilitadoras de la vida, y la mayoría no dan problemas en cuanto a espacio, especialmente las que se cargan por arriba. Pero si la vivienda es pequeña, y no hay espacio para colgar ropa, conviene, además, una secadora, aunque es de alto consumo.
Hay que considerar las características del hogar al comprar una aspiradora o enceradora. ¿Tiene piso de parquet, cerámica o alfombrado? ¿Es grande o pequeño? De la respuesta dependerá qué elegiremos y su potencia.
¿Que pasa con los gastos de luz?
En cuanto a luz, debemos tomar en cuenta qué tipo de iluminación queremos darle, lo que nos llevará a elegir lámparas economizadoras de electricidad, normales, halógenas, cada una de las cuales tiene ventajas y desventajas.
Un modo de ayudar a tener las cosas claras y optimizar el dinero que invertiremos es preguntarse, entre otras cosas, qué destino le daremos al aparato que vamos a adquirir, cuánto de lo que ofrece vamos a usar y si nuestro hogar es apto para acogerlo en cuanto a espacio.
El tema del gasto eléctrico
Para disminuir los gastos en electricidad, se aconseja que nos fijemos en cuánto va a consumir el artefacto.
«En Chile nos preocupamos de apagar las luces, las que significan apenas el 1 o 2 por ciento del gasto, y no nos importa comprar un calentador de agua que consume 1.500, 2.000 o más watts por hora, lo que para el europeo es inaceptable».
Cabe tomar en cuenta cuánta electricidad requiere cada electrodoméstico:
un microondas, 1.200 watts por hora;
un calefactor ambiental, 1.500;
horno eléctrico, 1.200;
plancha con vapor, 1.000;
refrigerador, 400 watts;
aspiradora, 1.500;
licuadora de hasta 6 velocidades, 450;
lavadora de 6 kilos, 320;
ventilador, 270;
televisor color, desde 50 watts (14 pulgadas);
computador, 250;
secadora de ropa 5 Kg, 300;
TV de pantalla plana (21 pulgadas), 115 watts;
minicomponente, 100;
monitor de computador, 75;
videograbadora, 30;
DVD, 15;
fax, 16;
radio AM/FM, 10;
secador de pelo, 1.000;
estufa, 1.000-2.000.
Autor: FUTBOLARGENTINO10